Mirando Miranda, se asoma en Monte Castro
Una jirafa de 40 metros de altura se asoma en el barrio porteño deMonte Castro, donde las casitas bajas y los pasajes con el ritmo suave de los domingos aún se imponen sobre las torres.
La jirafa protagoniza Mirando Miranda, la obra que pinta Alfredo Segatori, pionero del graffitti local en la década de 1980 y autor de otro mural, célebre: El regreso de Quinquela, un homenaje de 2.000 m2 al pintor de La Boca, consagrado como el más grande del mundo en la categoría “hecho por un pintor” por el Guinness en 2015.
La pieza de Segatori en Monte Castro no está terminada todavía pero, después de sorprender, ya saca también sonrisas. Y no sólo por la pinta amable de la jirafa. Además, Miranda está ubicada justamente en la calle Miranda 4725. De ahí, Mirando Miranda, el título. Un juego de palabras que le suma gracia.
“Soy de Floresta, de toda la vida, de muy cerquita de donde está el mural. Así que me entusiasmó que me pidieran hacerlo: hace mucho quería ofrecerle un trabajo al barrio”, cuenta a Clarín Segatori. “Es mi primer mural en Monte Castro y uno de los laterales de edifico más grandes que hice hasta ahora”, agrega.
¿Por qué una jirafa? “El tema del mural fue consensuado con la constructora que me convocó. Pero venía trabajando en una serie de animales en el Puerto de la Ciudad y, entre idas y vueltas de ideas y de bocetos, apareció el personaje, asomándose por una ventana hacia el barrio y jugando con la altura del edificio”, explica Segatori.
La torre no es lo único que explica la decisión de Segatori de pintar a la jirafa. Y en este punto Miranda se convierte en el disparador de un tema serio. “Hace rato que quiero hacer un homenaje a Pelusa, la elefanta que murió el año pasado en el ex zoo de La Plata -tenía 52 años y una enfermedad por la que no podía moverse normalmente y pasó casi dos años parada-. Y aunque la del mural se llama Miranda me gustaría que ayudara a recordar a la jirafa Shaki, que murió, también el año pasado, en otro ex zoo, el de Buenos Aires, descompensada”, dice Segatori. “La idea es que ayude a tomar conciencia sobre los derechos de los animales y la necesidad de los zoológicos estilo siglo XIX no existan más”.
¿Cómo reaccionan en el barrio? Segatori contesta: "En la zona, predominan las casas bajas. Monte Castro es tranquilo, con vecinos cordiales, que se acercaron desde el primer momento, contentos por la jirafa. Yo también estoy muy contento de que el mural haya sido bien recibido. Voy a estar toda la semana trabajando en él".
Segatori crea Mirando Miranda con látex para exteriores y con aerosoles. Pero además trabaja, en otras piezas, con una técnica original, también en línea con la ecología: arte+reciclaje, trash art (arte con basura) o arte cartonero. Por ejemplo, en Tecno Rasta y Chino Milenario (7 metros por 20), realizado en 2018 en el frente de un bar en Palermo, usó “bolsones de cartoneros, provistos por la cooperativa de recicladores urbanos El Ceibo, para el pelo del Rasta. Y la pelopincho pinchada de mi casa para el vestuario del ‘Chino Milenario’, entre otros elementos”.
-¿Qué más espera de Miranda, Segatori?
-Siempre espero que los murales le alegren un poco el día a día de la gente.
Y, tal vez, la dejen pensando.